En los últimos días han aparecido varias noticias en el periódico acerca de menores que grababan vídeos de contenido sexual y lo subían a las redes sociales.
Es evidente que estos menores no son especialmente listos. Rápidamente han sido localizados y detenidos. A la mayor parte de la gente nos parece que estos «niños» tienen un grave problema mental que es necesario atajar a tiempo. Si es que aún se está a tiempo de ello, realmente.
Pero…¿Y los adultos que han compartido el vídeo en las redes sociales? ¿Qué pasa con ellos?
No es excusa el desconocimiento de que eran menores. ¿Qué placer obtienen con la distribución de los mismos? Además de lo moralmente reprobatorio, hay una serie de componentes legales a tener en cuenta.
Ante estos hechos, la Policía Nacional ha recordado que producir, vender, distribuir, exhibir, ofrecer, poseer o facilitar por cualquier medio material pornográfico en cuya elaboración hayan sido utilizados menores de edad es delito y ha informado a los ciudadanos que este tipo de material no se debe compartir sino que se debe denunciar de forma privada a denuncias.pornografía.infaltil@policia.es
Precisamente, la Policía Nacional imparte más de 100.000 horas formativas al año en cerca de 5.000 centros escolares de toda España en materia de drogas, alcohol, acoso escolar, seguridad ciudadana y, especialmente, en el uso seguro y privacidad en empleo de las nuevas tecnologías.
Recomendaciones
Además, a los menores les ha recomendado que tengan especial cuidado con las fotos, vídeos y contenidos de todo tipo que se comparten en Internet, y ha advertido que hacerse fotos de carácter erótico y compartirlas es siempre un error puesto que «puede ocasionar situaciones de chantaje o ciberacoso sexual o acoso en el entorno escolar (grooming o bullying)».
Asimismo, ha indicado que grabar o «pasar» este tipo de imágenes de otras personas con el fin de perjudicarles es delito. Por otro lado, a los padres les ha aconsejado crear con los hijos un clima de confianza para hablar sobre estos temas, darles pautas para el correcto uso de redes sociales y smartphones y estar presentes cuando sus hijos se conectan a Internet para ver a qué contenidos accede.
También, recomiendan el uso de programas que filtran el acceso a determinados contenidos, concienciar a los hijos de las ventajas y riesgos que ofrecen las redes, alertar a los niños del riesgo de intimar por Internet con personas desconocidas, explicarles que no deben quedar con nadie que haya conocido a través de la red sin consultárselo a un adulto, y darle importancia si sus hijos le informan de contenidos que le han hecho sentir incómodos, y denunciarlos.
Basado en una noticia de elmundo.es